Sin Remitente
A la senadora Mónica Fernández Balboa no habría que descartarla en la selección del próximo candidato al gobierno de Tabasco por Morena. Al contrario: es una de las dos – la otra es Yolanda Osuna Huerta- que realmente tiene posibilidades de quedarse con la nominación en caso de que su partido decida que debe ir con una mujer y no con un hombre como candidato.
En una reciente entrevista, la senadora refrendó que mantiene su aspiración de gobernar Tabasco y que esperará los tiempos que vaya marcando su partido para darle formalidad a la búsqueda de la candidatura.
Ante la cercanía de la selección del candidato al gobierno de Tabasco, la realidad es que la senadora tabasqueña es un cuadro valioso de Morena que tiene su capital político y está en el ánimo del presidente Andrés Manuel López Obrador. Ha sido, desde el Senado, una aliada del mandatario.
Si bien no anda en campaña adelantada, el trabajo legislativo la ha mantenido en la agenda pública y los tabasqueños saben que hace su chamba desde el Senado.
La senadora se ha mantenido distante de las confrontaciones que algunos aspirantes y seguidores tienen entre sí en el grupo de los “adancistas” o contra los “mayistas”. O viceversa. Y es de las que resulta difícil encuadrar dentro de uno u otro grupo. Su prudencia es proporcional a su institucionalidad como morenista.
Ciertamente, la senadora ha mantenido un perfil bajo en contraste con el activismo que mantienen una decena de sus compañeros que también quieren ser candidato al gobierno. Pero no habría que confundir su sensatez con desinterés o porque no tenga alguna posibilidad de competir internamente para disputar la postulación.
Nadie podría restarle a la senadora lo clave que ha sido para el Presidente y ahora para el mismo secretario de Gobernación a la hora de sacar adelante acuerdos y leyes en el Senado, mucho más ante el “robaleo” del senador Ricardo Monreal que un día es liberal y otro conservador.
Que nadie vaya a decirse sorprendido entonces cuando la senadora aparezca entre los punteros en las encuestas serías y reales que seguramente tiene o tendrán muy pronto los dirigentes de su partido que están a tan solo tres meses de anunciar al abanderado presidencial y que después pasarán a enumerar a los que serán sus candidatos a gobernador, entre ellos al de Tabasco.
Por lo pronto, la senadora ha sido clara en sus aspiraciones y es alguien a quienes los tabasqueños no deben descartar para gobernar el Estado.
