La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, anunció una propuesta para reformar el sistema de contribuciones que Petróleos Mexicanos (Pemex) debe pagar al Gobierno, con el objetivo de aliviar la carga fiscal de la petrolera estatal. Durante su conferencia matutina, Sheinbaum explicó que la modificación busca asegurar que los derechos fiscales de Pemex no excedan el 30%.
Al inicio de la administración de Andrés Manuel López Obrador, el Derecho de Utilidad Compartida (DUC) era del 65%, pero se redujo gradualmente hasta alcanzar el 30% en 2024, con la intención de permitir a Pemex liberar recursos y mejorar su situación financiera. Ahora, en el contexto del Paquete Económico 2025, la Cámara de Diputados analizará la posibilidad de una reducción adicional del DUC, informó Alfonso Ramírez Cuéllar, diputado de Morena.
Ramírez Cuéllar, miembro destacado de las comisiones de Hacienda y Presupuesto, afirmó que el propósito de la reforma es continuar apoyando a Pemex en su recuperación financiera. La petrolera enfrenta una deuda de 97,300 millones de dólares, y aunque recibió respaldo financiero durante el sexenio pasado, aún requiere ajustes fiscales para cumplir con sus obligaciones.
Víctor Rodríguez Padilla, director general de Pemex, señaló que junto a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público está diseñando un nuevo régimen fiscal que tenga en cuenta la madurez de los yacimientos de Pemex y otros desafíos operativos. Este ajuste podría mejorar la situación de la empresa en campos maduros, cuya producción ha disminuido, y en su negocio de refinación, que sigue generando pérdidas.
Sheinbaum estableció como meta de producción para Pemex alcanzar los 1.8 millones de barriles diarios de crudo y condensados durante su mandato, mientras que la producción actual se sitúa en 1.7 millones.